Desde alrededor de 2010, comencé a pintar paisajes con acuarela, pero solo con los conocimientos adquiridos en la perspectiva arquitectónica de mi trabajo, me costó mucho captar bien la composición y las formas frente a un paisaje real.
Hasta ahora, en la producción de perspectivas arquitectónicas, me he centrado en el método de perspectiva simplificada y en el dibujo a lápiz con regla, utilizando aerógrafo y enmascarado, y como usaba colores de cartel, no estaba acostumbrado al manejo de acuarelas y pinceles. De hecho, la pintura de paisajes con acuarela transparente era algo inesperado, y al haberme trasladado al trabajo digital, mis habilidades en técnicas analógicas seguían siendo rudimentarias.
Tras muchos intentos y errores, me di cuenta de mi falta de habilidad en el dibujo y, tras practicar con figuras humanas y vehículos, He entrenado mis habilidades de dibujo mientras me basaba en paisajes reales. A medida que continúo, empiezo a darme cuenta de que poco a poco estoy mejorando.